Los cambios en los patrones de consumo generados por la pandemia tuvieron repercusión en el mantenimiento del empleo, la competitividad y las estrategias de negocio de las compañías. A raíz de ello, el Banco Mundial alertó en su momento sobre una posible contracción de la economía mundial que sería del orden de 5,2% para 2020.
En este contexto de irremediables cambios, apertura de oportunidades y revaluación de negocios, Prominence Partners, la consultora boutique referente en el acompañamiento a juntas directivas con altas expectativas de expansión en Latinoamérica, desarrolló un estudio en vivo, durante la transmisión del webinar “Estrategias Diversificadas de Negocio” organizado por la Conferederación Mundial de Negocios, que dio a conocer las expectativas de más de 150 empresas de los países de la región, frente a la estabilización económica mundial.
La más importante conclusión que arrojó el estudio es que la mayoría de los empresarios prevén que la recuperación económica en el mundo será gradual, aunque con diversas miradas frente a la evolución en el tiempo, pues ante la pregunta ¿En qué año usted cree que recobraremos la estabilidad económica global? el 45% de los participantes respondió que sucederá en 2022.
Para Álvaro Daniel Cagüeñas, CEO de Prominence Partners, las expectativas de estabilización económica manifestadas por los ejecutivos de Latinoamérica hacia el mediano plazo, así como la tendencia a implementar nuevas estrategias de negocio durante la pandemia, están muy alineadas a la tendencia de criterio de otros estudios en Estados Unidos.
“Al tener una perspectiva de mejora global, los empresarios asumen la responsabilidad de gestionar el tiempo y los procesos de sus compañías desde la capacidad prospectiva. En ese orden de ideas, el margen del período que para ellos tomará recobrar la estabilidad global, se debe emplear para diseñar estrategias y rutas de innovación de cara al abanico de oportunidades característico de las épocas posteriores a una crisis”, señaló Cagüeñas durante su exposición en el World Confederation of Business (WORLDCOB).
En esta carrera de preparación de las empresas, tomando como base la visualización de un futuro prometedor en el ámbito de los negocios posterior a la pandemia, la inversión en tiempo (dos años, como máximo), debe hacerse de manera inteligente, considerando datos actualizados del contexto global antes de tomar decisiones, así como evaluando proyecciones y expectativas sobre lo que se espera que suceda y considerando el rendimiento o comportamiento que ha tenido la compañía recientemente.
La buena noticia es que, como ya se señaló, la mayoría de los empresarios ha abordado esta situación de crisis desarrollando nuevas estrategias de negocio, lo que va en línea con la necesidad de hacer análisis prospectivos de los negocios para que los mismos sean más resilientes ante dificultades como las actuales. Sin duda, los directivos están retando su visión a largo plazo y cuestionando sus objetivos, para así poder maniobrar estratégicamente sus compañías.
Sin embargo, Cagüeñas advierte que esa tendencia probablemente se desarrolló en un contexto reactivo, no de preparación o planeación, por lo que es imperativo que los ejecutivos de las empresas evalúen si las estrategias de sus compañías son realmente prospectivas y contemplan escenarios de hasta 5 años, que es lo ideal y necesario.
La encuesta finalmente devela el carácter de los empresarios de darle respuesta al contexto de crisis sanitaria y económica mundial. La potenciación con innovación de los productos o servicios relacionados con el ´core business´ y el acercamiento continúo con los clientes a partir de mecanismos propios del marketing digital, son las estrategias más sonadas en plena contingencia global.
“Es importante entender las nuevas dinámicas, formas de consumo y tendencias actuales que están llevando a la digitalización de los negocios y la reindustrialización. Por ello, conocer las diversas estrategias de negocio y sobre todo las que han ayudado a las empresas a direccionar prósperamente su negocio, se vuelven elementos importantes, para que las juntas directivas redefinan las estrategias corporativas y competitivas de las compañías”, concluyó el ejecutivo.